Después de bastante tiempo de gestiones, decidir el modelo, el color, probarnos las tallas... Ya tenemos camisetas!! Así que, después de pensar si estrenar o esperar una carrera donde estuviésemos más, nos pudo el ansiaviva, y en Corral nos vestimos de verde con las nuevas equipaciones. Por otra parte, decir que otro montón de clubs del Circuito pensaron como nosotros y cambiaron a verde, con lo cuál, cuando queramos hacernos notar, echaremos mano de las sayas de la Blasa (que de esas tenemos el copyright).
También destacar que conocimos a los colegas de CorriendoporelCampo, buenos runners y mejores bebedores de cañas después de las carreras :) El testimonio gráfico de tan magno evento lo podéis ver en su blog, porque fueron ellos quien hicieron los "retratos". Dentro de poco gestionaremos una salida conjunta para correr, trepar y aberroncharnos al rocaje vivo, así que el lector que se quiera apuntar, que lo diga!
Los cinco locos que estrenamos equipación en Corral
Ahora sí, vamos a la carrera.
Llegamos un rato antes, con las cacharras de agua y las toallitas de jabón en el maletero (truco de Paco por si fallan las duchas), para coger los dorsales y encontrarnos con el resto. La temperatura no acompañaba mucho, aunque para cocinar un huevo frito en el capó de un coche no estaba mal. Pronto encontramos a Jose y a Antonio y a Chema y calentamos un poco antes de salir.
La salida pilló a algunos un poco distraídos, y es que no se puede estar al plato y a las tajás :p La calle estrecha, hacía que los primeros metros fuesen un poco agobiantes. Una vuelta corta y otras dos más largas a un circuito bastante técnico hasta completar los 10000 m. Salidas al campo, que siempre se agradecen un poco, y un repecho que se compensaba con una bajada en la que tenías que andar con ojo con los tapones de las botellas (echadlas fuera del trazado, jodíos!). Muchos puntos de agua, esponjas y arcos con agua pulverizada que se agradecían sobremanera. También muchos vecinos que nos regaban con mangueras a nuestro paso y bastante público por las calles para ser un pueblo tan pequeño.
Al llegar: picatostes, sandía y cervezas. Qué más se puede pedir! Chapó por la organización. El año que viene, a pesar de la fecha, estaremos por allí fijos.
En cuanto a resultados, decir que íbamos en plan verano y relax, a disfrutar la carrera y a hacer gana para la zurra. De todos modos, tampoco estuvo mal para estar en temporada baja.
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